El viernes, un tribunal mexicano emitió una suspensión definitiva contra la nueva ley de electricidad que apunta a fortalecer a la estatal Comisión Federal de Electricidad (CFE).
La ley cuenta con el apoyo del presidente Andrés Manuel López Obrador, quien quiere incrementar el control estatal del mercado energético. El presidente López Obrador afirmó que bajo la administración anterior, el mercado eléctrico estaba sesgado a favor de los operadores privados.
Bimbo y Walmart Inc. presentaron impugnaciones legales contra la ley, y dos empresas anónimas solicitaron la congelación de la ley. La Cámara de Comercio de Estados Unidos expresó su preocupación de que la nueva ley viola el Acuerdo entre Estados Unidos, México y Canadá (USMCA) y puede crear un monopolio en el sector eléctrico.
La medida cautelar estará vigente hasta que el caso se decida sobre sus méritos. El juez afirmó que la medida cautelar era necesaria “para prevenir daños económicos al sector eléctrico, asegurar la competencia y proteger el medio ambiente”.
El presidente López Obrador pidió a la Corte Suprema que resuelva el tema. El presidente López Obrador afirmó que “si se declara inconstitucional entonces gana el interés de las empresas privadas. Si los jueces no actúan con justicia, se les debe negar el derecho a hablar”.
Si se apela ante la Corte Suprema, 11 jueces deben votar en contra de la ley para declararla inconstitucional.